Maternidad, lo que no te cuentan.
Porque en la maternidad está bien no saberlo todo, está bien equivocarse y pedir perdón, está bien sentirse cansada y a veces superada. Por ello, nunca te sientas culpable. La culpa es un rincón sin salida, en el que no hay nada real por contar, ni nada nuevo por descubrir.
Recorre ese maravilloso proceso que es la maternidad como el camino de superación personal, que es de lo que se trata realmente. Ese camino que recorres en compañía de tu hij@.